Hoy, desde MyPoppins, nos hemos propuesto un reto: que aprendas a planchar como Dios manda. Porque ya va siendo hora de que dejes toda tu ropa bien estirada. Sin ninguna arruga. Como sacada de la tintorería. Si nunca has cogido una plancha (o lo has hecho pero sin tener ni idea de cómo), no te pierdas este post. Te contamos, con 9 simples pasos, cómo planchar tus prendas y te damos un montón de consejos y trucos para que el planchado sea perfecto.

Hoy, desde MyPoppins, nos hemos propuesto un reto: que aprendas a planchar como Dios manda. Porque ya va siendo hora de que dejes toda tu ropa bien estirada. Sin ninguna arruga. Como sacada de la tintorería.
Si nunca has cogido una plancha (o lo has hecho pero sin tener ni idea de cómo), no te pierdas este post. Te contamos, con 9 simples pasos, cómo planchar tus prendas y te damos un montón de consejos y trucos para que el planchado sea perfecto.
9 pasos para usar una plancha
Antes de nada, veamos qué necesitas para empezar a planchar.
- Plancha
- Tabla de planchar
- Ropa
- Tiempo y ganas para planchar
1. Asegúrate (y vuélvete a asegurar) de que la prenda se pueda planchar.
Revisa las etiquetas de la prenda que quieres planchar para ver si ésta puede ser planchada o no. Es muy importante que revises bien que la prenda se pueda planchar.¿Si no se puede y la planchas? Bueno, pues te quedas sin prenda. Así de claro.
2. Prepara la tabla de planchar
Te recomendamos que utilices una tabla de planchar pero, si no tienes ninguna, utiliza una superficie plana y firme (como por ejemplo, la mesa del comedor). Eso sí, asegúrate de no planchar sobre una superficie inflamable y siempre, siempre, coloca un paño entre la superficie (si no es la tabla de planchar) y la ropa.
3. Rellena el depósito de agua de la plancha
Agrega agua filtrada en la cámara de la plancha, hasta que llegue casi al borde. Siempre recomendamos revisar las instrucciones de la plancha para saber exactamente cuánta agua rellenar.
4. Clasifica tus prendas según su material
Cada material necesita un método diferente de planchado y una temperatura distinta. No es lo mismo una prenda de algodón que una de seda, por ejemplo. Por eso es esencial que dividas tus prendas en diferentes grupos según el material del que estén hechas, para ir planchando grupo por grupo por separado.
5. Coloca la prenda en la tabla
Asegúrate de que no hay ninguna arruga. Si la hay, cuando pases la plancha por encima, harás una línea arrugada en la tela que costará más quitar.
6. Calienta la plancha
Enchufa la plancha a la corriente y gira el dial de calor hacia el ajuste que sea adecuado para tu tipo de prenda. Cuando la plancha haya llegado a la temperatura deseada, verás una lucecita que lo indica (cada plancha lo indica diferente, pero lo verás claramente). Como hemos visto, cada material necesita una temperatura distinta. Empieza a planchar siempre las prendas que necesitan menos temperatura.
Por ejemplo:
- La prendas de seda se tienen que planchar a temperatura tibia. Se planchan del revés, con una pasada rápida y usando algo de vapor.
- El poliéster, el nylon, el acetato y las fibras acrílicas se planchan a temperatura tibia (si el nivel de calor es muy intenso, podrían derretirse o fundirse).
- Las prendas de lana y tejidos similares, se planchan en caliente y con varias pasadas rápidas.
- El algodón y el lino requieren que la plancha esté muy caliente y la aplicación de vapor para humedecer la prenda y eliminar mejor las arrugas.
7. Plancha el primer lado de la prenda
Pasa el lado caliente de la plancha de manera firme y lenta por uno de los lados de la prenda. Plancha cada parte individual de la prenda por separado (si tienes que planchar una camisa, plancha el cuello, luego los puños, mangas, hombros, tapeta y finalmente el cuerpo principal de la camisa).
¡Ojo! No dejes la plancha apoyada directamente sobre la prenda o puedes quemarla.
8. Evidentemente, plancha el otro lado de la prenda
Voltea la prenda y plancha el otro lado, teniendo mucho cuidado en no dejar arrugas, si pasa la plancha por encima, costará quitarlas.
9. Cuelga la prenda
Inmediatamente luego de plancharla, cuelga la prenda en una percha y deja que se seque con el aire. Si la amontonas o la dejas mal colocada, seguramente quedará con arrugas.
Consejos para un mejor planchado
Ahora que ya sabes cómo planchar una prenda, te vamos a dar unos cuantos consejos y trucos para que consigas el mejor planchado posible.
- Antes de comenzar a planchar una prenda, te recomendamos humedecerla, para que el planchado sea más sencillo. Si tu plancha no tiene la opción de pulverizador, compra uno para realizar esta acción.
- Ten a mano una botella de spray llena de agua, para ir rociando la prenda si se seca antes de que termines de planchar.
- Vigila con el cable de la plancha: te recomendamos que mantengas el cable suelto para que la plancha no se caiga de la tabla.
- Coloca siempre la plancha en posición vertical cuando no la utilices. ¡No queremos quemar la ropa ni la tabla de planchar!
- No le quites los ojos de encima a la plancha cuando la tengas parada. Al ir y venir es posible que la toques con alguna parte del cuerpo y te quemes.
- Coloca un paño de algodón humedecido encima de la prenda cuando plances para que no salgan brillos.
- Para planchar las camisas, comienza siempre por el cuello, desde el extremo hasta el centro y por los lados. Luego, plancha ambos puños. Después, estira bien las mangas hasta que no quede ninguna arruga, y plánchala de abajo hacia arriba. Por último, plancha todo el cuerpo de la camisa.
- Para planchar pantalones, comienza planchando la zona de los bolsillos y la cintura. Continúa por la parte de las piernas y termina con los dobladillos. Si los pantalones son de vestir, usa un paño de algodón sobre la tela para que el brillo perdure.
- Cuando se te resistan arrugas en una plancha, te recomendamos colocar un papel de aluminio entre la tabla de planchar y la prenda. Encima de ella, coloca un paño humedecido en agua con una gota de amoniaco
- Voltea las prendas delicadas antes de plancharlas. Algunas telas (como la pana, el lino, el rayón, el satén o la seda) son muy delicadas, planchar su superficie podría dañarlas.
- Por último, deja que la plancha se enfríe por lo menos 10 minutos antes de guardarla.
Bien, ya sabes cómo planchar tus prendas. Ahora sólo te falta ponerte a la acción. Respira, coge la plancha, la tabla y tu ropa y empieza. No te pongas más excusas. Hazlo y punto. Y cuéntanos en los comentarios cómo lo has hecho y cómo te han quedado tus prendas. Que queremos saber lo que has aprendido con esta guía básica para aprender a planchar.
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